Las redes sociales han ido evolucionando con el paso del tiempo; su popularidad ha variado, al igual que la forma de usar dichas redes, las funcionalidades que ofrecen y cómo no, las posibilidades comerciales que estas redes brindan a los usuarios. A lo largo de este post se analizará la evolución de la publicidad en redes sociales.
Si bien Facebook ha sido siempre la red social por excelencia, en la actualidad hay otra red social que está consiguiendo dejar al gigante en segundo plano; se trata de Instagram. Cabe destacar que Instagram fue comprada por Facebook en 2012 cuando aún estaba lejos de ser lo que es hoy en día.
Ahora bien, ¿cuáles son las posibilidades comerciales que brindan estas redes sociales a sus usuarios?
Por un lado Facebook ofrece a sus usuarios la posibilidad de realizar campañas publicitarias en ambas plataformas, lo que puede ser de gran utilidad si la empresa se está planteando realizar una campaña en ambas redes. Sin embargo esta alternativa puede resultar decepcionante puesto que disminuye el control del gasto que se realiza en cada una de las redes sociales, por lo que si se quiere tener un control total sobre la distribución del gasto se deberá optar por realizar la publicidad por separado.
A día de hoy Facebook permite crear anuncios segmentando el público al que se quieren dirigir dichos anuncios y facilitando el acceso a los resultados. Además permite crear páginas con el objetivo de mostrar su presencia en dicha red y crear respuestas automáticas a mensajes mediante bots de Messenger para contactar con los clientes.
La popularidad que Instagram ha ido ganando con el tiempo ha despertado el interés por las empresas de publicitarse en dicho espacio y ha dado lugar a herramientas de venta como el Instagram Shopping, que permite etiquetar los productos que se muestran en las publicaciones junto a su precio. Por otra parte, los post que se publican en Instagram pueden ser promocionados con el objetivo de llegar a gente más allá de los seguidores propios.
Como se ha mencionado anteriormente la distribución de la publicidad en ambas redes puede ser gestionada a través de Facebook, y lo mismo pasa con el control de los resultados. Facebook ofrece unas métricas que permite analizar a las empresas el alcance de su campaña. Las principales son:
- Interacciones: mide las interacciones con usuarios.
- Impresiones: número de personas que han visto el anuncio.
- Conversión: mide la efectividad del anuncio.
- Importe gastado: cantidad de dinero invertida en la campaña.